En el año 2002 durante la
gestión municipal del intendente, señor Mario Díaz, desde la secretaria
de cultura y educación a cargo de la Lic. María
Inés Malvicini se organizo un taller de cerámica aborigen dictado por
el escultor ceramista Carlos Gaspar Moreyra de la fundación “hombre
barro y fuego”.
Observada
la localidad del maestro, el trabajo dentro del taller y luego de
finalizadas las jornadas, se lo invito a visitar un horno de ladrillos
en la localidad rural de villa Espil, establecimiento del señor Gustavo
Jonte.
De
esta visita también participaron el docente Victor Garay, (Discipulo de
Moreyra que participo de las obras realizadas en Azcuenaga y Cucullu,
quien lamentablemente falleció hace pocos meses) y la artesana y
profesora Karina Capitini.
Realizada
la visita al horno, Moreyra acepto la propuesta de desarrollar a futuro
un proyecto vinculado a la vida dentro del horno de ladrillos e
intentaron otras técnicas artesanales de producción.
El
fin buscado era homenajear a los trabajadores del horno, agregar valor
al producto y poner en escena la magia que existe entre las manos del
hombre y el adobe.
Pasa
el tiempo y analizando nuestro territorio pudimos visualizar y
diagnosticar que la zona donde predominaba la industria ladrillera era
la localidad de Cucullu, motivo por el cual se comienza a avanzar en la
consolidación de este proyecto.
Se
realizan algunos intentos para desarrollar el mismo presentándolo a un
grupo de vecinos de la sociedad de fomento en el año 2004, pero no se
pudo avanzar por falta de buena comunicación y por cuestiones netamente
económicas.
Antes
de comenzar con el proyecto en Cucullu, surge otra propuesta vinculada
al adobe y el profesor Moreyra junto a Cristina Terzaghi (especialista
en arte monumental) realizan en Azcuenaga (otro pueblo rural del
partido) el 4 de Abril de 2004, el primer mural latinoamericano
realizado en adobe y horneado a leña y utilizando técnicas precolombinas
de color, este trabajo fue financiado por el pueblo y la actual gestión
municipal del Doctor Luis A Ghionne.
A
partir del año 2005 impulsado desde la secretaria municipal de
desarrollo humano y acción social a cargo de la doctora Cintia Ghione,
se concreta el proyecto presentado en el ministerio de desarrollo humano
de la provincia de Buenos Aires, se crea el primer taller provincial de
fotografía en pueblos y parajes rurales a cargo del profesor Diego
Arranz, cuyo objetivo consiste en la enseñanza de fotografía a los niños
con participación de los padres y familiares.
También participan con financiamiento al proyecto, el consejo escolar.
Entre
las escuelas seleccionadas por el área de inspección, se ve favorecida
la escuela Nº5 Enrique de Larrañaga de la localidad de Cucullu, tomando
como epicentro operativo el horno de ladrillos y la escuela de paraje
rural de Tuyuttí.
Sigue pasando el tiempo y llego el año 2006, año de nuestro bicentenario.
En
esa oportunidad, desde la secretaria de producción y turismo se
presenta nuevamente la propuesta a la comunidad de cucullu, pero la
misma fue elevada a todas las entidades intermedias del pueblo.
Sin
el acompañamiento y compromiso de ellos y fundamentalmente de la
familias horneras, hubiese sido imposible llevar a cabo este proyecto
A
partir de ese año comienzan a llegar pequeños contingentes de turistas y
creamos la marca turística “CUCULLU pueblo rural alfarero” con la
intención de trabajarla como eje temático de desarrollo local y
sustentable, a demás de ponerlo en escena una vez a año con la fiesta
del hornero.
El
horno de ladrillo se había transformado en un atractivo cultural
importante, atesorando una enorme y fuerte cultura litoraleña.
También
en forma paralela en el año 2006 desde la secretaria de acción social,
se crea el primer taller de cerámica aborigen a cargo de la profesora
Karina Capitini.
Ya consolidados estos objetivos, se consulta al maestro Moreira para saber que queria el representar desde el adobe.
Su
decisión y homenaje fue al trabajador del horno de ladrillos. Eleva su
proyecto al intendente municipal con el fin de realizar junto a un grupo
de alumnos de bellas artes de la ciudad de la plata la escultura a la
que denominará “el ladrillero”, cita en la plaza del pueblo.
Hubo
otras propuestas a desarrollar a partir del adobe, seguramente con el
transcurso del tiempo las desarrollara junto a toda la comunidad.
Han pasado 2 años y el pueblo de cucullu esta orgulloso de mostrar su cultura e identidad ante el visitante.
Hubo pobladores que creyeron en este proyecto desde sus orígenes y luego de un año son muchos los que se han sumado.
Las primeras visitas guiadas por el pueblo comenzaron en el año 2004, actuando como guía la docente del pueblo Silvia Rossi.
Debemos
destacar especialmente a quien desde el primer día nos abrió
desinteresadamente las puertas de su establecimiento para ser visitado y
recorrido, Guillermo Ramírez.
La
fiesta del hornero, que en el año 2007 alcanza su segunda edición, es
un proyecto que no solo tiende poner en escena la magia que existe entre
las manos del hombre, el adobe y el fuego, si no que también existen
otros actores como el INTA, convocado en el año 2006 con el fin de
mejorar la tierra desde su calidad y paisaje luego de la extracción de
la misma.
Otro
de los actores es la universidad del Salvador, representada por la
estudiante de la carrera de “ciencias ambientales”, Paz Mazzola, quien
viene visitando y estudiando el pueblo y su zona de influencia desde el
año 2005.
Presento
su tesis universitaria que a la brevedad será elevada al intendente
municipal para compartir con los pobladores de Cucullu y brindar su
aporte con el fin de mejorar la calidad de vida de todos los habitantes
del pueblo y especialmente las familias horneras.
Los invitamos a seguir descubriendo la magia que existe entre el barro, las manos del hombre y el fuego.
Arq. José Maria Yanes.
Asesor el turismo y pueblos rurales secretaria de producción y turismo.
Municipalidad de San Andrés de Giles. Marca turística: “Ciudad, pueblos y parajes”.
El
turismo es para nosotros una de las herramientas para alcanzar el
desarrollo local y sustentable de los pequeños poblados rurales.
Los pilares fundamentales de este proyecto son la educación en todos sus niveles y las entidades intermedias de los pueblos.